Installa Steam
Accedi
|
Lingua
简体中文 (cinese semplificato)
繁體中文 (cinese tradizionale)
日本語 (giapponese)
한국어 (coreano)
ไทย (tailandese)
Български (bulgaro)
Čeština (ceco)
Dansk (danese)
Deutsch (tedesco)
English (inglese)
Español - España (spagnolo - Spagna)
Español - Latinoamérica (spagnolo dell'America Latina)
Ελληνικά (greco)
Français (francese)
Indonesiano
Magyar (ungherese)
Nederlands (olandese)
Norsk (norvegese)
Polski (polacco)
Português (portoghese - Portogallo)
Português - Brasil (portoghese brasiliano)
Română (rumeno)
Русский (russo)
Suomi (finlandese)
Svenska (svedese)
Türkçe (turco)
Tiếng Việt (vietnamita)
Українська (ucraino)
Segnala un problema nella traduzione
Dejar reposar. Cuando se las ve "transpiradas", porque han despedido abundante líquido, están listas para usar. Pero hay que secarlas con un repasador o papel de cocina para retirar el jugo, que se lleva el amargor.
Batir los huevos sazonados con sal, pimienta y dos cucharadas de agua o leche. Se puede agregar una pizca de queso rallado, o caldo en polvo para darle más sabor.
Pasar las berenjenas por el huevo y el pan rallado dos veces, para que la cobertura quede más gruesa. Para hacerlas más livianas, se pueden pasar primero por pan rallado, luego por huevo y nuevamente por pan.
Freír u hornear.
⠀⠀⣿⠓⠚⡠⠚⠁⣀⣤⣄⠀⠀⢠⣨⠳⣾⡏⠀⠀⠀⣴⣾⣿⣿⣿⣷⡄⠀
⠀⢿⠛⡖⠘⡇⣰⠋⢁⣉⡉⢀⡤⠬⡍⣉⡙⢧⠀⠀⠈⣿⣿⣿⣿⣿⣿⡇⠀⠀⠀⠀⠀
⠀⡼⠊⢁⡼⠁⠁⠋⠉⠀⢀⡎⣾⣒⣾⡁⠙⣈⣧⣴⣶⣿⣿⣿⣿⣿⣿⠀⠀⠀
⠀⣇⠀⢸⠀⠀⠀⠀⠀⠀⢈⡭⣳⣶⣯⣷⣾⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿
⠀⢸⣇⠸⠀⠀⠀⠀⠀⠀⡎⡼⣿⣿⣿⣿⣿⣿⣿⡿⠟⠋⠹⣿⣿⣿⣿⣿⣿⠀
⠀⢸⠁⠀⢆⠀⠀⠀⠀⠀⠘⠯⣉⣛⣛⠽⠉⠁⠈⡇⠀⠀⠀⠈⠛⠛⠟⠋⠁
⠀⠸⡄⠀⣈⢧⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⢀⡇
⠀⠀⠙⠚⣿⠈⣇⠀⠀⣀⠀⠀⡀⠀⠀⣀⡴⠀⡏⠁⠀
⠀⠀⠀⠀⢸⣸⡌⠉⠉⠁⠀⠀⠉⠉⠉⠁⠀⠀
⠀⠀⠀⠀⠈⣿⡇⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⢳
⠀⠀⠀⣀⡴⡟⠃⠀⠀⠀⢳⡀⠸⣆⠀⠀⠀⠀⠸⡷⢤⡀
⠴⠚⠉⠁⠀⠙⠲⠤⠀⠀⠀⠁⠀⠈⠀⠀⠀⠀⣰⠃⠀⠈⠙⠲