Instale o Steam
iniciar sessão
|
idioma
简体中文 (Chinês simplificado)
繁體中文 (Chinês tradicional)
日本語 (Japonês)
한국어 (Coreano)
ไทย (Tailandês)
Български (Búlgaro)
Čeština (Tcheco)
Dansk (Dinamarquês)
Deutsch (Alemão)
English (Inglês)
Español-España (Espanhol — Espanha)
Español-Latinoamérica (Espanhol — América Latina)
Ελληνικά (Grego)
Français (Francês)
Italiano (Italiano)
Bahasa Indonesia (Indonésio)
Magyar (Húngaro)
Nederlands (Holandês)
Norsk (Norueguês)
Polski (Polonês)
Português (Portugal)
Română (Romeno)
Русский (Russo)
Suomi (Finlandês)
Svenska (Sueco)
Türkçe (Turco)
Tiếng Việt (Vietnamita)
Українська (Ucraniano)
Relatar um problema com a tradução
🟨🟨🟨🟨⬛
🟨🟨🟨🟨🟨⬛
🟨🟨🟨🟨🟨🟨⬛⬛
🟨🟨⬛⬛⬛⬛⬜⬜⬛
🟨🟨⬛⬜⬜⬛⬜⬜⬜⬛
🟨⬛⬜⬜⬜⬜⬛⬜⬛⬜⬛ cuando yo la vi
🟨⬛⬜⬜⬜⬜⬛⬜⬜⬛
🟨⬛⬜⬜⬛⬜⬜⬛⬛
🟨🟨⬛⬜⬜⬜⬜⬛🟨⬛
🟨🟨🟨⬛⬛⬛🟨🟨🟨⬛
🟨🟨🟨🟨🟨🟨🟨⬛⬛⬛
🟨🟨🟨🟨🟨⬛⬛⬛⬛⬛
🟨🟨🟨🟨⬛⬛⬛🟫🟫⬛
🟨🟨🟨⬛🟫🟫🟫🟫🟫⬛
🟨🟨⬛🟫🟫🟫🟫🟫🟫⬛
🟨🟨⬛🟫⬛🟫🟫🟫🟫⬛
🟨🟨⬛🟫⬛⬛⬛⬛⬛
🟨🟨⬛🟫🟫🟫⬛
🟨🟨🟨⬛🟫🟫⬛
Me aburrí de perder siempre, de ver a mis hijos tristes, y ver como el resto de Sudamérica se burla de nosotros. Me aburrí de esta mediocridad y de estos jugadores que no saben mojar la camiseta. Desde mañana, me levantaré de la cama y seré Australiano, esa selección que juega con el orgullo en el pecho y siempre pone huevos dónde vaya. Esa es una selección, ese es un país, todos jugadores de nivel mundial.
¡Que viva Australia y toda su gente! 🌏